La magia del sazón cubano: secretos que cruzan fronteras
El sazón cubano no es solo una mezcla de condimentos: es una herencia viva, un arte transmitido de generación en generación, capaz de llenar cocinas, corazones y memorias… incluso a miles de kilómetros de la Isla.
🌿 1. El sofrito, el alma del sabor
Todo buen plato cubano comienza con un sofrito. Ajo, cebolla, ají y tomate salteados lentamente en aceite son la base de muchos de nuestros guisos. Es más que una técnica: es un ritual familiar.
🥄 2. El secreto está en el punto
No es solo lo que usas, es cuándo lo usas. Aprender a agregar el comino, el orégano o el laurel justo a tiempo marca la diferencia entre un plato bueno y uno que te transporta a Cuba.
🧄 3. El ajo: bendito y abundante
En la cocina cubana no se escatima con el ajo. Machacado, sofrito, crudo o hervido, es el gran potenciador de nuestro sabor criollo.
🍋 4. La acidez justa, con limón o vinagre
Muchos platos llevan ese toque final que los despierta: unas gotas de limón en los frijoles, vinagre en el mojo o en la yuca. Son detalles que hacen que el sabor se eleve.
✈️ 5. Donde hay un cubano, hay sazón
No importa si estás en Miami, Madrid o Montreal: el cubano lleva su sazón en el corazón. Y con unos pocos ingredientes clave, puede recrear una comida con alma caribeña en cualquier rincón del mundo.